Una solución muy popular en los interiores modernos son los techos suspendidos, que permiten ocultar los desniveles existentes del techo, la instalación eléctrica o la ventilación. En los cuartos de baño, la mayoría de la gente no quiere lámparas colgantes, principalmente por la posibilidad de provocar un cortocircuito en el sistema eléctrico. Los focos empotrados son una alternativa ideal. En su elección, es muy importante fijarse en el grado de protección IP. ELVA no solo tiene un bonito aspecto, sino que su grado de protección es IP54.